martes, 7 de octubre de 2014

La explotación sexual infantil se puede definir como una agresión a la dignidad y a los derechos fundamentales de los niños, éste fenómeno se expande día a día, ya que la infancia es el estado más vulnerable de un ser.


Definición de explotación sexual infantil

Un explotador sexual es alguien “que se beneficia injustamente de cierto desequilibrio de poder entre él mismo y una persona menor de 18 de años, con la intención de explotar sexualmente a esa persona, ya sea para sacar provecho o por placer personal”.
Esta definición se formuló en Estocolmo, durante el Primer Congreso Mundial contra la Explotación Sexual de los Niños (1996) y se utilizó también en el Segundo Congreso Mundial realizado en Yokohama, cinco años después, en 2001. Dicha definición sirve para considerar la explotación sexual en relación con abuso sexual, violencia sexual y explotación sexual con fines comerciales.
Abuso sexual
El abuso sexual es infligido por alguien que está en una posición de poder sobre la víctima. Puede ser un miembro de la familia, un miembro de la comunidad donde vive la víctima, un profesor o cualquier otra autoridad. Los niños, vulnerables e indefensos, a menudo son los objetivos y las víctimas de adultos, quienes abusan de su poder con el fin de aprovecharse de ellos.
Violencia sexual
La Organización Mundial de la Salud define la violencia sexual como “todo acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción, independientemente de la relación de ésta con la víctima y en cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo.”
Los individuos culpables de cometer actos de violencia sexual en contra de los niños, no lo hacen simplemente para satisfacer sus deseos de tener intimidad con sus víctimas, sino porque saben que los niños serán más fáciles de controlar.
Explotación sexual con fines comerciales
El comercio sexual es un problema en muchos países alrededor del mundo. Es ilegal, se manifiesta de distintas maneras y resulta difícil medirlo.
La expresión “explotación sexual con fines comerciales” puede designar, ya que atañe a los niños, relaciones sexuales en las cuales al niño le pagan por sus servicios. Sin embargo, a menudo no es así y más bien es el explotador quien se queda con el dinero.
En el caso del tráfico de niños, las víctimas son reclutadas, transportadas, alojadas y alimentadas por el explotador, quien las obliga a trabajar en prostíbulos u otros establecimientos, los cuales ofrecen tal actividad.
En cuanto a la pornografía infantil, ciertos explotadores no dudan en fotografiar, filmar o grabar escenas de sexo que involucran a menores de edad, las cuales se venden después para obtener ganancias comerciales. (¿Cómo se puede identificar un sitio de pedofilia?)
El comercio sexual está a menudo ligado con el turismo. Muchos extranjeros, hombres y mujeres, no dudan en visitar países tales como Tailandia para tener relaciones sexuales con niños.
Factores que contribuyen a la explotación sexual infantil
Varios factores contribuyen a la explotación sexual de los menores. Entre estos se incluyen:
- Pobreza.
- Redes de tráfico infantil.
- Crisis humanitarias.
Desarrollo mundial de la industria sexual.